El diseño de salas está basado completamente en la esencia de su espacio, ya sea de su marca o personalidad, esta debe estar presente en cada rincón de la habitación. Es por ello que diseñar salas grandes puede resultar confuso, ¿cómo llegar a todos los rincones del espacio sin saturarlo de muebles y decoración? ¡Fácil! Con buena iluminación.

Para orquestrar dichas hazañas arquitectónicas, diseñando el lobby de un hotel o la gran sala principal de su residencia, es necesario crear una atmósfera armoniosa con el uso de luz natural y artificial, dejando que el buen uso de colores y texturas tengan su propio papel protagónico.

La iluminación natural

Abriéndose paso a través del vasto espacio llega la luz, un elemento tan básico que a veces olvidamos usarlo a nuestro favor. Una buena iluminación le dará vida a cada elemento del espacio, infundiéndolo con encanto y personalidad. Durante el día, aproveche la bondad natural de la iluminación al permitirle paso a través de grandes ventanales, columnas y tragaluces. Ubique estratégicamente las áreas de convivencia, como los sofás y sillones, cerca o directamente bajo la luz. Para atenuar su intensidad, use cortinas delgadas o semi-transparentes que minimicen el calor del sol sin bloquear la luz natural.

Generalmente es bajo la luz natural que podemos sacar provecho y presumir nuestro buen gusto en colores y texturas. Recuerde: estos son el reflejo de su marca o personalidad, ya que añaden dimensión y profundidad al lienzo. Los colores favoritos para el diseño de salas grandes son dignos de la realeza: azul zafiro, vino aterciopelado e incluso tonalidades doradas. Sin embargo, podemos aprovechar las tendencias de colores de este año para crear espacios modernos y atrevidos.

Decoración de salas elegantes. Candelabro asimétrico colgando del techo sobre una sala modular.

Y para añadir un toque táctil a la sinfonía del diseño, hablemos de las texturas. Dependiendo de la ubicación de su espacio, querrá hacer uso especial de ciertos materiales y texturas. En climas fríos, por ejemplo, querrá usar alfombras orgánicas que añadan calidez y dimensión al diseño; almohadas afelpadas para reconfortar a los huéspedes; y telas aterciopeladas que sean cálidas y cómodas al tacto.

Por otro lado, en climas cálidos, querrá hacer uso de piedra natural que se mantenga fría al tacto; mueblería orgánica de mimbre o sofás acolchados, tapizados de telas frescas que permitan respirar y refrescarse. Piense en la experiencia que quiere regalar a sus huéspedes, póngase en sus zapatos y cree el oasis ideal con ayuda de los colores y texturas.
   

Iluminación artificial

Candelabro asimétrico de burbujas de cristal empotrado al techo

En esta foto: Talia Large Chandelier de Visual Comfort & CoCortesía de Acampora Interiors.
    

Cuando la noche cae, es cuando la luz artificial de su elección cobrará protagonismo. Una luz artificial bien pensada le dará a su ambiente un aura de extravaganza. Piense en candelabros ubicados con maestría, cuya luz cae como cascada desde el techo, dándole a su espacio un brillo majestuoso que resalte con suavidad y nuevos matices los colores y texturas de su diseño.

Diseño de interiores con candelabros simétricos gigantes.

En esta foto: Brockway Extra Large Lantern de Visual Comfort & CoCortesía de Sarah Yerger Interiors.
    

Su elección de lámparas o candelabros dependerá ampliamente de su marca o personalidad. Piense en su esencia, ¿es esta suave y refinada? ¿Tiene toques clásicos o modernos? ¿Se siente mejor en ambientes delicados o en atmósferas más atrevidas?

De igual manera, además de la iluminación principal, recuerde añadir toques de luz en todos los rincones de su espacio. Aquí es donde tomamos prestados algunos conceptos del diseño de interiores pequeños, pues incluso los grandes salones se benefician de una iluminación y diseño a detalle.